Se ha escrito mucho sobre el resveratrol y sus efectos sobre la salud. Algunos la han calificado prácticamente como elixir de juventud.
David Sinclair, descubrió que el resveratrol (sustancia que abunda sobre todo en la uva y sus semillas) alargaba la vida en los ratones. Los ratones alimentados con dietas altas en grasa (60% de calorías de grasa) evitaban numerosos problemas relacionados con la obesidad cuando se complementaba su dieta con resveratrol (22,4 miligramos por kilogramo de peso corporal y día). En comparación con los ratones que no recibieron resveratrol, aquellos ratones mostraron una mayor supervivencia con menores patologías.
Desde entonces, nuestros supermercados y farmacias se han llenado de productos basados en el uso del resveratrol. Su uso más polémico es como suplemento alimenticio en cápsulas que suelen contener entre 20 mg y 100 mg de resveratrol cada una.
Sin embargo, el experimento de Sinclair no ha sido reproducido por otros grupos de investigación por lo que su hallazgo ha sido puesto en duda recientemente.
En lo que se refiere a la especie humana, existen múltiples evidencias científicas sobre los efectos beneficiosos del resveratrol en enfermos de diabetes, obesidad, problemas musculares, y ciertos tipos de cáncer.
En el tubo de ensayo, el resveratrol neutraliza radicales libres y otros oxidantes. Sin embargo, hay poca evidencia de que el resveratrol sea un importante antioxidante in vivo. La presencia de resveratrol en sangre es muy inferior a la de otros antioxidantes como la vitamina C , ácido úrico, vitamina E y glutatión . Además, el resveratrol se localiza en sangre en forma de sus metabolitos, cuya acción antioxidante puede ser menor.
La estructura química del resveratrol es muy similar a la del dietilestilbestrol, un potente estrógeno sintético, prohibido hace años en la alimentación animal. Sin embargo, el resveratrol funciona a veces como imitador de estrógenos, a veces como inhibidor de la actividad de los mismos.
El resveratrol podría actuar limitando la presencia y actividad de determinadas sustancias carcinógenas en nuestro organismo pero también promoviéndo otras. El resveratrol inhibe in vitro la proliferación de una variedad de líneas celulares de cáncer humano, incluidos los de mama, próstata, estómago, colon, páncreas y tiroides. Sin embargo, no es eficaz en inhibir el desarrollo del cáncer de pulmón inducido por sustancias cancerígenas en el humo del cigarrillo. Los estudios sobre el metabolismo humano de resveratrol sugieren que la ingesta diaria, incluso en dosis muy altas de resveratrol, no puede dar lugar a niveles en los tejidos lo suficientemente altas para realizar la mayor parte de los efectos protectores demostrados en estudios in vitro .
Lo que está claro, al menos en estudios in vitro, es que inhibe la formación de vasos sanguíneos, mecanismo fundamental en el desarrollo de los tumores. También inhibe la inflamación y la arterioesclerosis.
Al resveratrol se le han encontrado una serie de posibles efectos cardioprotectores in vitro. Sin embargo, las concentraciones de resveratrol para producir estos efectos son a menudo superiores a las que se han medido en sangre después del consumo oral de resveratrol . Los resultados de algunos estudios en animales sugieren que altas dosis orales de resveratrol podría disminuir el riesgo de trombosis y la aterosclerosis.
Además de los efectos positivos de resveratrol, éste puede tener también hay posibles efectos secundarios negativos. Algunas personas son incapaces de hacer frente a sustancias extrañas como el resveratrol y desarrollan problemas digestivos como diarreas. Otras reportan un aumento de la fuerza y el vigor sexual. ¿Es posible que el resveratrol tenga un efecto hormonal? Quizás muchas de estas personas estén actuando de manera irresponsable, tomando dosis por su cuenta y convirtiéndose en conejillos de indias en el uso de una sustancia cuyos límites de eficacia y seguridad son de momento desconocidos. Una dosis de 20 mgr al día no parece tener ningún peligro pero sus efectos benéficos tampoco son evidentes. Se desconoce la dosis tóxica de esta sustancia: dosis de hasta 5000 mgr no producen efectos adversos graves . Además, cuando se toma oralmente, el resveratrol parece ser bien absorbido por los seres humanos, pero su biodisponibilidad (presencia en sangre) es relativamente baja debido a que es rápidamente metabolizado y eliminado. En un estudio realizado en con personas sanas que recibieron una dosis oral de 25 mg de trans-resveratrol (resveratrol sintético) por cada 70 kg de peso corporal se vió que éste alcanzaba una concentración máxima (416 hasta 471 microgramos / litro) en sangre 30 minutos después de la administración. La seguridad de los suplementos que contienen resveratrol durante el embarazo y la lactancia no ha sido establecida.
